Tecnología Social

Podemos identificar “Tecnología social” como el movimiento que trabaja para eliminar las brechas y dificultades existentes en relación a la tecnología y la sociedad, ya sea a nivel local, comunitario o global. En sus orígenes, surge por la preocupación e implicación de un grupo de personas que no están de acuerdo con la distribución existente de los recursos en el planeta.

Este movimiento pretende implicar a la población en una nueva forma de trabajar y comportarnos en sociedad, ya que ayuda a solventar problemas generados por la economía, las políticas, etc. Y es que en el mundo en el que nos encontramos, el acceso o uso de las TIC puede ser uno de los principales motores de vulnerabilidad social.

Trabajar e intervenir conforme al ritmo evolutivo que se está llevando a cabo en relación a la tecnología es esencial, pues si se pretende que nuestras acciones tengan la suficiente repercusión como para generar cambios positivos en los destinatarios, y ayudarles a salir de esa posición en riesgo de vulnerabilidad, se ha de modificar las estrategias y modelos de intervención actuales.

Usar, que no abusar, de la tecnología hoy en día es necesario y prácticamente obligatorio, pues aunque no queramos verlo, la tecnología nos rodea, según la Real Academia de la lengua Española, tecnología es el “Conjunto de teorías y de técnicas que permiten el aprovechamiento práctico del conocimiento científico”, por lo que se podría decir que TODO es tecnología.

Al ir por la calle es habitual ver a la gente con un Smartphone, en el trabajo con una tablet, conducir con un gps, ver a los jóvenes, y ya no tan jóvenes, con videoconsolas portátiles, asisitir a conferencias, cursos y formaciones regladas por internet, etc. Pero sin embargo no es tan común ver a entidades sociales utilizar la tecnología como medio para trabajar con sus destinatarios, excepto para aquellos contenidos específicamente tecnológicos. Desde las entidades sociales, debemos renovarnos y actualizar nuestros modelos de trabajo para poder concienciar al resto de instituciones y entidades a promover un correcto desarrollo y uso de estas nuevas herramientas que nos permitan seguir mejorando como sociedad.